Si no está usted preparad@ para estar sol@ no pretenda ser campeón@. No es que una posición ganadora lleve implícita la soledad -la llamada soledad "de la cumbre"-, pero es cierto que hay que concienciarse para lo que podríamos llamar "comportamientos sorprendentes en círculos allegados".
La presencia de una mente ganadora inquieta a mucha más gente de la que parece, porque la mediocridad es general y todo lo que asoma por encima de ella acostumbra a producir sorpresa primero y rechazo después. No me refiero específicamente al deporte, que también: posiblemente porque el éxito ajeno es tomado por muchos como una especie de provocación, una demostración permanente de la propia incapacidad. No al principio cuando el campeón@ está luchando por la gloria. No cuando todavía resuenan los aplausos (físicos o morales) de la victoria. Pero sí al cabo de un tiempo cuando los elogios ya están silenciados. Bueno, y no siempre es así, pero muchas veces aquellos elogios se van transformando en críticas y algunos "amigos" que antes aplaudían se han desvanecido. Tampoco era tan buen@. Tuvo mucha suerte. El campeón@ ve con sorpresa aumentar la distancia con bastantes de sus relaciones y enfriarse su antes cálido entorno. ¿Qué ha pasado? Pues supongo que poca gente (sólo un gran amig@, que también existen) quiere compartir tareas con un campeón@. ¿No es el campeón@? Pues que se lo haga. Es posible incluso que mucha gente desee inconscientemente su derrota final para llegar a aquello tan horroroso de "¿ves? ya te dije que no aguantaría mucho tiempo" (es decir: ha quedado demostrado que todos, incluso los campeones, somos igual de burros)
Los éxitos de todo tipo pueden comportar soledad y un aumento extraordinario de adversarios desconocidos. Estar sol@ no es grave. La gente a la que le gusta lo considera un lujo. Para otros puede ser un drama. Pero casi siempre es triste ver alejarse a personas a las que se quería o en las que se confiaba. Pues hay que llevar la mente a la reconfiguración de la red social personal pensando en los buenos tiempos, en las victorias y en los abrazos y mirar adelante. Fue bonito mientras duró. Y, ahora, a por otra batalla, quizá llena de nuevos amigos, y aunque sólo lo fueran al principio, ya estaría bien. Nada dura para siempre. ¿O hay algún amor/amistad que sí?
Hay que disfrutar de lo que se tiene. Y tenerse a un@ mism@ es importante. No se podrá amar de verdad a alguien si antes no se está en paz y orden con un@ mism@. El amor no consiste en esperar que alguien nos quiera y nos dé muchas cosas y rellene nuestros huecos anímicos. El amor consiste en dar, y por consiguiente antes hay que tener. Y ahora recuerdo a una amiga mía, mujer inteligente y grandísima profesional que un día me dijo:
-¿Sabes? He conocido a un hombre. No es guapo ni inteligente, pero es un ser humano masculino y cariñoso. Y no me tiene miedo.
¿Le ha gustado este post? A Charles le encantaría saber de alguna vivencia suya al respecto. Gracias.
Hola Amigo Charles,buenas noches!!!
ResponderEliminarMe ha encantado,si hasta lo he imprimido!!!
Un abrazo AMIGO!!!